Querido Diario, Travesía 55/ "MONKEY MAN"
Querido
Diario:
Este magullado Navegante
debe confesar que ya ha recibido unos cuantos sopapos que se salían de la
pantalla mientras veía el debut como director del actor Dev Patel, “Monkey Man”.
En 2008 y cuando tenía 18 años de edad, el joven actor
británico de ascendencia hindú Dev Patel
comenzó a hacerse conocido a nivel mundial.
Acababa de protagonizar “Slumdog
Millionaire”, la película triunfadora en los Oscar con un total de ocho
estatuillas. El film dirigido por Danny
Boyle cautivó a los espectadores con una visión vibrante y colorista de la
India, país de origen de los antepasados de Patel, tanto que, años después, en
2016, el intérprete volvió aparecer en “Lion”,
una especie de remake encubierto de “Slumdog
Millionaire” que, visto lo visto, no ha sido suficiente, pues ahora, en su
debut como realizador, el muchacho incide de nuevo en las mismas localizaciones
con “Monkey Man”.
Monkey Man, “Hombre mono”, es el seudónimo o nombre artístico
de un joven hindú que de noche participa en combates de boxeo clandestino y de
día trabaja como camarero en un club de lujo que sólo le sirve como tapadera
para poder culminar su venganza contra quienes provocaron la muerte de su madre
años atrás. Por descontado que dicha
venganza va a llegar más pronto que tarde, y pobres de los inocentes (pocos) a
los que pille por en medio…
La plataforma Netflix
aceptó financiar y posteriormente distribuir la primera película como director
de Dev Patel, quien se entregó a la tarea como si no hubiera un mañana,
ejerciendo como guionista, director, productor, coreógrafo de lucha y, por
supuesto, protagonista. Sin embargo,
parece ser que Patel se excedió en el tono violento y sangriento de la acción,
de modo que Netflix se echó atrás y, si no hubiera sido por la aparición in extremis de la productora Monkey Paw, propiedad del cineasta Jordan Peele, posiblemente “Monkey Man” no hubiera llegado a
estrenarse. Desde luego, el amigo Patel
no se ha cortado a la hora de mostrar sangre y violencia, dicen que siguiendo
los patrones del cine made in Bollywood
y sus directores insignia Sanjay Leela Bhansali, Rajkumar Hirani o Karan Johar, aunque,
para mi, son más que evidentes las influencias de la omnipresente “Slumdog Millionaire”, además de “John Wick” (la indumentaria del
protagonista está obviamente inspirada en él) e incluso “Kill Bill”.
Viendo “Monkey
Man”, tuve tan presente “Slumdog
Millionaire” que no pude evitar pensar que Dev Patel es una suerte de hijo
adoptivo cinematográfico de Danny Boyle, en una relación similar a la que
mantuvieron, por ejemplo, Clint Eastwood y Don Siegel o, en menor medida, John
Wayne y John Ford. Discípulos poderosamente
influenciados por sus maestros, tanto en lo temático y artístico como en la
localización física de sus propuestas, muy evidente en el caso de “Monkey Man”, una película bastante mona que, violencia aparte, se queda a
años luz de su modelo.
Hasta aquí puedo leer, mi querido Diario, y me despido hasta
la siguiente entrada.
por
El Navegante
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